Esto es debido a que su cuerpo interpreta los alimentos normales como virus y lucha contra ellos elaborando respuestas alérgicas.
Para conseguir la ingesta de los nutrientes necesarios en un niño de su edad, los cuales no puede adquirir mediante la alimentación que lleva, es preciso que el enfermo sea alimentado seis veces al día a través de un tubo conectado directamente a su estómago. Aquí os dejo una imagen de Finley conectado a dicho tubo.
Muchos especialistas del Hospital Great Ormons Street situado en Gran Bretaña, han realizado numerosas pruebas para dar con las causas de este trastorno. A día de hoy no han logrado dar con ellas, por lo que siguen en el proceso de investigación.
A pesar de nuestro afán por los dulces, ¿Pensáis que seriáis capaces de llevar este tipo de alimentación?
Aquí tenéis el link con el que podéis acceder a la noticia completa:
http://www.que.es/ultimas-noticias/sociedad/201402191716-nino-solo-puede-alimentarse-dulces.html?anker_1
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ResponderEliminarHola Isabel Montes, me parece una noticia muy interesante, y la verdad, es que siempre he pensado que ojalá solo me alimentase de dulces, ya que, para mí, son lo mejor. Aunque pensándolo fríamente no podría vivir sólo comiendo dulces porque necesitaría de otros alimentos que me aportasen más nutrientes, vitaminas o proteínas, y además los acabaría aborreciendo. En mi opinión, a pesar de que Finley solo puede comer dulces, necesita ser alimentado seis veces al día a través de un tubo, y me parece muy duro y difícil de llevar para un niño de tan solo 3 años. Ya que a pesar de comer únicamente dulce, no deja de ser una grave y rara enfermedad de la que no se conoce casi nada.
ResponderEliminarIsa, respondiendo a tu pregunta, absolutamente no. No podría llevar una vida a base de dulces, en primer lugar porque la mayoría de ellos no me gustan a excepción del chocolate y poco más y en segundo lugar porque hay muchos otros sabores que me encantan y no podría probar. Creo que la vida de Finley es y será muy dura, y por ello creo que debe conservar siempre esa sonrisa que vemos en las fotografías.
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